Mi ex me persigue

Enrique pasó de tener un admirador secreto a tenerlo como novio y ahora, de novio, ha pasado a convertirse en un ex que le provoca pesadillas.

El pobrecito tiene hasta miedo de salir a la calle porque más de una vez ha visto a su ex esperándolo en la puerta e incluso le ha seguido algunas calles. Te aconsejo que en esos momentos no te vuelvas loca del coño y respira. Ve a lo tuyo e ignóralo porque no hay mayor desprecio que no hacer aprecio.

Lo de que te acose con llamadas, mensajes de texto (qué arcaica es la pobre, eso ya no se lleva),  Whatsapp o redes sociales llévalo lo mejor que puedas y para eso vas a necesitar mucha paciencia. Algunos te dirán que cuelgues fotos positivas, con amigos y pasándotelo bien y que pongas en el estado del perfil lo feliz que eres, pero eso no harás más que alimentar su mala leche y su rencor. Mi consejo es que seas tú siempre y pongas las fotos que te de la gana, sin querer aparentar nada, pero siempre de forma positiva para que te ayude a ti y no para alimentar el ego de nadie.

No dejes que nadie controle tus tiempos y menos una persona que ya no forma parte de tu vida. Recuerda que tú te conectas o desconectas de las redes (o del Grindr) cuando te da la gana y vas y vienes dónde quieras porque puedes, quieres y te da la gana. Y aquí incluyo que contestarás a los mensajes cuando te apetezca hacerlo porque no estás obligado a responder en el mismo momento. Ya se nos ha olvidado cómo era antes cuando no teníamos teléfonos móviles y creo que las urgencias eran las mismas antes que ahora.
Mira, mi consejo es que lo bloquees de todo lo que puedas. Eso es como cerrar el candado y tirar la llave, aunque hay algunos que ni por esas se amedrentan. Para esos, sólo hace falta desearles que se toman por equivocación dos pastillas a la vez, una para dormir y la otra un laxante.